De nuevo encontramos 7 céntimos/minuto, pero esta vez el abanico se ha abierto y no tenemos la restricción de tener que ser contrato en el anterior operador.

Estamos viendo como en los últimos meses la competencia entre los distintos OMV es feroz, y las tarifas se están rebajando hasta límites inauditos.

Pero no todo son las tarifas, también tenemos que valorar la calidad del servicio, los posibles valores añadidos de servicios adicionales, etc. En este apartado donde los OMV se están distanciando cada vez más de los operadores tradicionales que aportan muy poco en este aspecto.